sábado, 26 de octubre de 2013

AMANECERES Y OCASOS



- “¿Qué es lo que más te gusta de la vida, anciana?”

- “Los atardeceres”

- “¿No te gustan más los amaneceres? Mira que no he visto cosa más hermosa que el nacimiento del sol allá, detrás de las verdes colinas.

- “¿Sabes?... Yo prefiero los amaneceres.” La anciana dejó sobre el piso la canastilla de espigas que sus arrugadas manos llevaban. Dirigiéndose hacia el vasallo, con tono de voz dulce y conciliador, dijo:

- “Los amaneceres son bellos, sí. Pero las puestas de sol me dicen más. Son momentos en los que me gusta reflexionar y pensar mucho. Son momentos que me dicen cosas de mí misma.”

- “¿Cosas? ¿De ti misma...?”. No sabía a qué se refería la viejecilla con aquella frase.

 La anciana añadió:- “Claro. La vida es como un amanecer para los jóvenes como tú. Para los ancianos, como yo, es un bello atardecer. Lo que al inicio el precioso, al final llega a ser plenamente hermoso. Por eso prefiero los atardeceres... ¡mira!”

La anciana apuntó con su mano hacia el horizonte. El sol se ocultó y un cálido color rosado se extendió por todo el cielo del Imperio Tré; él guardó silencio. Quedó absorto ante tanta belleza.


sábado, 19 de octubre de 2013

IDEAL LOCO




Un arquero quiso cazar la luna. Noche tras noche, sin descanso, lanzó sus flechas hacia el astro. Los vecinos comenzaron a burlarse de él. Inmutable, siguió lanzando sus flechas. Nunca cazó la luna, pero se convirtió en el mejor arquero del mundo.

Alejandro Jodoroswky

sábado, 12 de octubre de 2013

LA VERDAD


sobre lo difícil que es confrontarla a veces.....


Érase una vez un hombre que buscaba la verdad.

Un buen día llegó a un lugar en donde ardía una innumerable cantidad de velas de aceite.

Éstas se encontraban cuidadas por un anciano que, ante la curiosidad de este individuo, respondió que ese era el lugar de la verdad absoluta.

Aquél le preguntó qué significaban sus palabras, a lo cual respondió que cada vela reflejaba la vida de cada individuo sobre la tierra: a medida que se consume el aceite, menos tiempo de vida le queda.

El hombre le preguntó si le podía indicar cuál era la de él.

Al descubrir que la llama estaba flaqueando, a punto de extinguirse, aprovechó un instante de distracción del anciano y tomó la vela de al lado para verter un poco de aceite de ésta en la suya.

Cuando estuvo a punto de alzar la vela, su mano fue detenida por la del anciano diciendo:

- “Creí que buscabas la verdad”


de la red


domingo, 6 de octubre de 2013

LAS ARENAS MOVEDIZAS






sobre el ser consciente de las situaciones...

Un hombre va caminando descuidado, cuando, de repente, se cae en un foso de arenas movedizas.

Tranquilamente, el hombre observa cómo se va hundiendo, lentamente. Ve que poco a poco va desapareciendo dentro de las arenas, pero él continúa tranquilo.

Pero cuando las arenas casi le alcanzan la boca y la nariz, se pone nervioso y comienza a pedir ayuda.

Alguien oye sus gritos, lo localiza, y le acerca una rama para ayudarle.

El hombre agarra la rama, pero no hace el esfuerzo necesario para salir.

- "¡Tire de la rama... y salga!"

- "¡No, gracias, buen hombre! Si yo no necesito salir... si aquí estoy bien... ¡tan sólo quiero que las arenas no me tapen la boca!"